Como es habitual, otra vez nos piden que vayamos a votar en
las elecciones sindicales. El modelo sindical en España está diseñado para que
los/as trabajadores/as deleguen su capacidad de decisión y acción en
profesionales del sindicalismo, los/as cuales gozan de garantías frente a la
empresa, para que esta sea la única que tenga capacidad de negociación sin
rendir cuentas a ningún/a trabajador/a. Esto ha llevado por un lado a que el
sindicalismo se institucionalice, pierda toda reivindicación de contenido
ideológico, y por otro lado, a que los/as trabajadores/as se olviden de la
lucha por la defensa y promoción de nuestros intereses de clase, ya que se
llega a la misma lógica que el parlamentarismo: la política es asunto de los/as
políticos/as, y el sindicalismo es algo exclusivo de los/as sindicalistas. Así
se ha llevado a la apatía y sumisión de los/as trabajadores/as, y a que sigamos
y acatemos las directrices de las cúpulas y directivas de los sindicatos sin
cuestionarlos. Votar en las elecciones sindicales a lo único que lleva es a que
se continúe perpetuando que los sindicatos cobren subvenciones a través del
criterio de "representación" que legitima tu voto, y que siga
habiendo personas que parasiten de tu trabajo diario y sigan diciendo que nos
representan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario